¡Las mujeres fuertes y capaces pueden hacer cualquier cosa!

«SisterWorks me ha enseñado muchas cosas, pero lo más importante es que somos capaces, somos fuertes y podemos hacer cualquier cosa. Lo único que necesitamos es la oportunidad».

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Son las palabras de Claudia Freitas. Desde julio de 2018, forma parte de SisterWorks, una empresa social sin fines de lucro de Melbourne, Australia.  

SisterWorks forma parte de un programa educativo global llamado Segunda Oportunidad y Aprendizaje Vocacional, una asociación entre ONU Mujeres y la Fundación BHP que está ayudando a las mujeres marginadas a través de vías de entrenamiento que generan empleo, espíritu empresarial y oportunidades de liderazgo.

Además de Australia, el proyecto piloto de tres años también se ha implementado en México, Jordania, la India, Chile y Camerún, ofreciendo espacios de aprendizaje físicos como virtuales, acceso a materiales de aprendizaje de calidad y vínculos con oportunidades de empleo y emprendimiento significativas y diversificadas, adaptadas a las necesidades individuales de las mujeres como aprendices y a su futuro personas con ingreso.

SisterWorks apoya a las mujeres a re-imaginar sus futuros, entregándoles las herramientas y habilidades de negocio adecuadas para convertirse contribuyentes importantes para sus familias, comunidades y para la economía Australiana. Al asociarse con ONU Mujeres, SisterWorks puede expandir sus esfuerzos y, a la larga, tener un impacto positivo en la vida de miles de mujeres en Australia.

Para Claudia, quien se mudó de Brasil a Australia en el año 2015, eso significó aprender inglés y desarrollar nuevas habilidades empresariales para mejorar su confianza y sus perspectivas de trabajo.

La primera vez que oyó hablar de SisterWorks fue a través de una compañera brasileña en su clase de inglés.

«Fui, y por primera vez en Australia, me sentí en igualdad de condiciones otra vez».

Después de inscribirse en un curso de manejo de alimentos y recibir su certificado, Claudia recibió una oferta de trabajo de cocina en el laboratorio de producción de SisterWorks.

«Cuando vi mi primer pago, me alegré mucho porque me sentí valorada», dice Claudia.

Desde entonces ha aprendido a coser, mejoró su inglés y aumentó su confianza a través del entrenamiento de ventas y el programa de habilidades para hablar en público de SisterWorks. 

Ahora, Claudia es una presentadora inspiradora y tutora de otras mujeres que forman parte de SisterWorks.

«Mi inglés no es perfecto, pero no importa porque cada día me siento más segura», dice.

Su próximo paso es mudarse a Perth en enero, pero esta vez no tiene miedo.

«Sé cómo vender, cómo comprobar la calidad y cómo hablar. Y aunque extrañaré a todas mis compañeras, estoy feliz porque sé que tengo las habilidades para empezar de nuevo».

Obtenga más información sobre el programa educativo de Segunda Oportunidad y Aprendizaje Vocacional de la ONU Mujeres aquí.