Conozca a Peter Murray, que se ocupa del territorio desértico australiano con comunidades remotas en un clima cambiante

Como parte de nuestra contribución a las deliberaciones en las discusiones de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en la COP-27 de noviembre de 2022, Ampliseed busca promover las voces de los líderes indígenas y tradicionales que trabajan en la primera línea del cambio climático y la conservación de la biodiversidad, ayudando todos los días a proteger y restaurar nuestros hábitats naturales. El artículo a continuación es una adaptación de una entrevista con Peter Murray, CEO de Yanunijarra Aboriginal Corporation y presidente del Proyecto 10 Desiertos, que se realizó en la Conferencia de la Alianza Indígena del Desierto de 2022 en Yulara, Australia.

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Peter Murray, CEO de Yanunijarra Aboriginal Corporation, de pie frente a la obra de arte <i>Wirrulnga</i> de Nanyuan Napangati Imagen © Kirsty Galloway McLean

Peter, ¿podría contarnos un poco sobre el trabajo que hace?

Soy el CEO de Yanunijarra y me ocupo del territorio Ngurrara en la región de Kimberley, Australia Occidental. Administramos el Gran Desierto de Arena, al sur de Fitzroy Crossing. Nuestro enfoque principal es la administración de la tierra: trabajamos con guardaparques para realizar estudios de biodiversidad, gestión de incendios, control de animales salvajes y gestión de los impactos del cambio climático. Nuestra visión principal para avanzar es construir un futuro económico autosuficiente y tener el control de nuestras tierras con título de propiedad en el Gran Desierto de Arena para crear nuevas oportunidades para que nuestra gente trabaje en el territorio.

Su trabajo basado en la naturaleza contribuye a alcanzar metas climáticas y de conservación nacionales y globales. ¿Existen cambios que le facilitarían concretar más aspiraciones sociales y económicas?

Para muchos pueblos del desierto, es realmente difícil crear un futuro económico viable porque existe la idea errónea de que no hay nada en el desierto y dependemos del desarrollo de la minería y el pastoreo para generar oportunidades a través de nuevos acuerdos. Pero el programa de guardaparques apoya el acceso al territorio con fondos limitados, lo que les permite a nuestros guardaparques usar nuestro conocimiento tradicional y salir al territorio para gestionarlo y transferir nuestro conocimiento a las personas y los guardaparques jóvenes. Sin embargo, si bien el puesto de guardaparques es remunerado, este depende de programas financiados por el gobierno, está limitado a una pequeña cantidad de puestos financiados y solo se renueva de proyecto a proyecto; esa falta de seguridad tiene un impacto en nuestra capacidad de planificación a largo plazo, que se suma al desafío de crear un futuro económicamente viable para los pueblos remotos del desierto.

Usted mencionó anteriormente que los administradores de sus tierras están lidiando con el cambio climático. ¿Qué tipo de cambios han visto en el territorio?

Sabemos que el cambio climático está ocurriendo en todo el mundo y, para lograr la administración de la tierra en el territorio, el cambio climático es uno de varios impactos y desafíos que debemos incluir en nuestro plan de trabajo. Medimos los cambios climáticos a través de cómo impactan en nuestro conocimiento tradicional, por ejemplo, cuándo florecen ciertas flores o cuándo los cocodrilos ponen sus huevos. Tradicionalmente, nuestros indicadores estacionales están relacionados con los patrones climáticos: sabemos cuándo va llover, lo que nos ayuda a regular actividades, como cuándo cosechar o quemar la tierra. Sin embargo, la realidad actual es que las lluvias acontecen más tarde de lo normal, a pesar de que, por ejemplo, los cocodrilos ponen huevos cuando se supone que deben hacerlo; esto significa que los huevos no eclosionarán, porque el clima se está volviendo demasiado caluroso y las inundaciones llegan demasiado tarde. 

Todo está conectado. Confiamos en el conocimiento de los dueños tradicionales y guardaparques: sabemos cómo deberían ser las cosas, pero tenemos que seguir adaptándonos porque el clima y los indicadores estacionales están cambiando. Entonces, realmente estamos caminando en dos mundos: combinamos técnicas tradicionales y modernas de administración de la tierra. La mayoría de los grupos del desierto tienen conciencia y conocimiento cultural; nacemos como administradores de la tierra, tenemos el conocimiento que nos transmitieron nuestros antepasados y tenemos nuestras responsabilidades para administrar la tierra. Sin embargo, también tenemos que medir lo que sucede a nuestro alrededor en cuanto al cambio climático y aprender a adaptarnos a esos cambios acelerados. Tenemos el conocimiento de cómo quemar y cuándo quemar, pero si las lluvias llegan más tarde, necesitamos cambiar el momento para realizar la quema en la estación correcta. Y esto también tiene otros impactos: muchos dueños tradicionales en el desierto dependen de los alimentos que se recolectan como parte de la quema, pero, si tienen que quemar más tarde porque la lluvia se retrasa, tienen que esperar mucho tiempo antes de poder acceder a esos alimentos, y esto reduce su seguridad alimentaria. 

¿Qué le da esperanza para el futuro?

Tengo la esperanza de tener más guardaparques jóvenes en el territorio y transferir conocimientos de los dueños tradicionales a los guardaparques jóvenes. Tener una identidad y una conexión cultural con el territorio nos permite administrar la tierra con orgullo.

Ampliseed  es una red global de proyectos de conservación y cambio climático a gran escala que conecta a los profesionales con un enfoque basado en los derechos y centrado en el ser humano para desarrollar la resiliencia ambiental. Cuenta con el apoyo de la Fundación BHP y es facilitada por laPollination Foundation ; juntos aprendemos, compartimos y amplificamos.  La Alianza Indígena del Desierto (IDA) está trabajando para construir la red de conservación conectada liderada por indígenas más grande del mundo. La IDA ejecuta el  Proyecto 10 Desiertos con el apoyo del Programa de Resiliencia Ambiental de la Fundación BHP.